domingo, 19 de mayo de 2013

Cosas que me preocupan.




Los gordos, los calvos, la gente con gafas de vista. Es decir, gente común con estas características, parecen que no enamorarse y por la misma regla tal parece que nadie los ama. Es común encontrarse foto montajes de personas, que físicamente están estupendas, con alas en la espalda, colas de sirena, mordiendo una fresa etc. Que de cierta manera lo que sugieren es una idolatría a la belleza, pero como la belleza aburre. Y en sí misma no es un mensaje, no se suele viralizar.

Sin embargo, con menos frecuencias encontramos el tipo de personas antes descrito. Los gordos, los calvos, la gente con gafas de vista. Que suelen en algunas ocasiones ser más bien motivo de burlas. Y salen en los llamados memes (Palabra que tiene su origen en Richard Dawson que se refiere a la imitación, replicación y transmisión del mismo modo que un gen es una unidad hereditaria.) Refiriéndose a la similaridad con la que se transmite dicho fenómeno por las  redes sociales, mutando exactamente como un gen, sin perder su fin,   que en este caso es hacer reír. Lo cual en más de una ocasión me ha llevado a preguntarme:

¿Será que esta gente no tiene sueños ni se enamora?
¿Será que no comen fresas, porque están a régimen?
¿Será que a las gordas no se le marcan los pezones cuando llueve?
¿Será que la gente con gafa, no puede mirar triste y taciturno al suelo?
¿Será que a un calvo no le pueden salir alas en la espalda?
¿Será que no le duelen ni les importan las burlas ?   Nada ahí lo dejo.

Al parecer como seres sociales, mostramos más respeto por unos cánones de belleza que por otros.  Y digo más por uno que por otros. Porque en sí misma todas las personas deberían ser hermosas independientemente de su condición física. Sin embargo, al parecer no es así. Y lo que sí me queda claro que un mal llamado feo, lleva mejor su fealdad que un bello su belleza. 

Pintura: Óleo sobre Lienzo
Artista plástico: Botero

Mujer apasionada y lejana.


Mujer testaruda y lejana.
Cuán alta puede ser tu expectativa de vida, 
si crees poder vivir, 
el día en que te deje de amar.
Qué tan lejos pretendes ir?
Imaginando que yo no pueda llegar.
Cómo pretendes borrarme, 
imaginar que no existo.
Si alguna vez juntos fuimos 
uno o más que dos.
Si sabes que yo 
no podré olvidarte jamás.
Mujer testaruda y lejana.
Calla todo lo que sabes.
Abraza y besa a cualquiera, 
sigue su rastro 
en la tierra de sus zapatos 
o en la arena.
Pero no pretendas 
amor más grande que el mío 
ni para toda la vida.
Porque eso jamás.
lo habrás de encontrar. 
mujer testaruda y a veces lejana. 
arderán la ira y tus penas en lágrimas.
y será lo que me ignoras 
si es tu deseo
de este camino la última parada.
pero haz que no sea adiós de tus labios, 
la última palabra. 
Porque de ti para toda la vida, 
no me podré despedir jamás.
Mujer apasionada y lejana. 
Que no sea la sabiduría quien guíe tus pasos, 
sino tu corazón y tu alma. 
Porque eras más bella entonces.


 LPF.01F85.

Rompe las reglas.


El mundo puede ser hostil para cualquiera que pretenda romper o cambiar ideas preconcebidas. Es difícil imaginar o saber que puede motivar a una persona a exponerse a las críticas, comentarios u opiniones de otros. A sabiendas de que siempre habrá otro punto de vista, valoraciones negativas incluso despotismo y burla en algunos de los juicios que se emitan sin tener en cuenta más argumentos u otras razones.

Sin embargo a pesar de la hostilidad nos exponemos. Nos salimos de nuestra zona de confort, como si todas las normas hubieran sido hechas para ser rotas, a veces eludiendo alguna verdad impuesta o buscando un propósito. Todas las normas que en algún momento fueron concebidas para protegernos. Y llegados a este punto no buscamos aprobación ni reconocimiento, no se trata de atesorar ni de ambiciones personales y puede que tan sólo únicamente sea una cuestión de sonrisas y lágrimas, de propósitos y sueños.

La hostilidad puede hacer más grande y fuerte a los que no tienen miedo a equivocarse o a perder. A los que jamás se regirán por la ley de mínimo esfuerzo, a los que pretenden cambiar el mundo muy desde adentro, sin haber encontrado otra manera de vivir o hacer  que no sea la de hacerle frente a sus miedos. Hace bastante tiempo que perdí el temor a equivocarme, sin embargo he de reconocer que estuve demasiado tiempo haciendo lo correcto (lo que todos esperaban) y os puedo asegurar que no hay nada de novedoso ni espectacular en ello. Romper las reglas, no dejéis de perseguir vuestros sueños, por más veces que os equivoquéis, por hostiles que puedan venir los tiempos. Y sin mayores recompensas os garantizo una muerte digna, la libertad o salir más fuerte después de cada intento. 



sábado, 11 de mayo de 2013

Todos los días de mi vida.

Borrador.Parte 19.

Al final del camino todos los días de mi vida sólo serán una cifra, como mis años, los aniversarios o las vidas que pueda tener o no un gato. Al final del camino puede que me pregunte dónde está  el resto del tiempo que no viví contigo, los que en mi alma suman una eternidad y en tu cuenta sólo cuatro. Al final del camino puede que no sea crucial nada de lo que me quede por hacer y por eso la sabiduría de los años haga más densos mis huesos, más nítidos mis recuerdos, más elocuente mis silencios y más dulce mi pasado, en la misma manera que hace más perecedera mi voluntad y criterio de haberte amado... 

Y a excepción de algunas personas y tus besos, casi todo lo que considero importante, puede que en algún momento deje de serlo sin que pueda remediarlo. Porque algunas cosas caen por su propio peso y otras simplemente mueren con los años. Por eso nunca digo mi edad a quien me parece ajeno o extraño, porque para quien no me conoce todos los días de mi vida sólo serán una cifra, que para su creer bien podría ser de lo que me quede o de lo dado...

Y puede que muera joven  o a lo mejor con cien años y puede que todo lo que te ame muera conmigo. Puede que todo lo que te ame quepa en un libro o en un párrafo. Pero nunca serás una cifra, ni primera ni última. Serás la única y sin importar cuantas vidas me tome, en todas te habré esperado...
LPF.01F85