Bendito este amor que a veces duele.

Que no sea la vida quien deje de sorprenderme,

Y que no sean de todas las horas, 

esas, que no hemos pasado juntos, 
las que me digan hasta donde o cuando 

debería quererte.

Que no sea la suerte ni el dolor,

ni la envidia ni la pena.

Quienes traigan de vuelta al amor,

o quienes le condenan.

Que no sea la cordura, 

quien arranque a sangre fría

palabra alguna al corazón,

sólo porque la irreverente razón, no sueña. 

Y entonces bendito el amor, sí.

Bendito el amor que a veces duele,

y que en el pecho como una lanza se clava.

Bendito el amor que a veces duele, sí.
y la soledad que a veces le acompaña.
Bendito el amor que ama la vida 
que con amor se defiende,

que no quiere escapar ni injusticia comete,
que por amor más que morir, crece.

Bendito este amor que a veces duele 
y todas las formas en las que te ama

y mi inocencia y la espera.

Bendita la maldita virtud de mi ignorancia 

y mi desobediencia. 

Benditas ambas no porque haya decidido quedarme.

Benditas ambas por no permitirme hacerlo 

de cualquier manera.
Bendito este amor que duele, sí.
y bendita la luz de tu sonrisa 
que ilumina mi alma
y da forma a mi esencia.

LPF.01F85.

Artista Plástico: Leonid Afrémov

A veces tu silencio...

A veces tu silencio, 

se posa en mi ventana cual gota de lluvia. 

Más hoy, hoy parece una lágrima.

Impávido, inmóvil 

no sé si espera la luna 

o si pretende empapar al Sol.

Y le escucho, 

más a veces no sé, 

no sé si es tu silencio quien me habla. 

A veces no sé, 

no sé si quien le habla soy yo.

Y se parece a mi esperanza, 

y quiero cuando menos hacerle el amor. 

y tu silencio enmudece, 

me mira a los ojos y me engaña, 

tu silencio hace que mi amor haga aguas

mientras se desliza  

cual gota de lluvia sobre la ventana,

sin importarle la mugre ni los rayos del Sol. 

Tu silencio que tanto se parece a mi alma,

a la palabra melancolía y al amor,

esconde mil poemas y una promesa olvidada,

que jamás cumplió.

Y se desliza como lo hizo mi sudor entre tus nalgas,

hasta el último rincón.

Allí donde se hizo el silencio,

donde por primera vez,

hicimos el amor...

LPF.01f85
Artista Plástico. Gustave klimt 

Amor rutilante.

Este amor rutilante,
cual obra de pintor egregio.
Sangra, como espalda de mil latigazos,
más no muere ni clemencia implora.
Porque sabe que mal haya
quien a la razón porfía.
Más quien por su gusto muere,
la muerte le sabe a gloria.
Este amor casi insensato.
Me divierte, me ilusiona y me sofoca.
Severo y puro,
si lo niego me quedo a oscuras y a solas,
persiguiendo sombras...
Si yo pudiera mi moza,
más que tenerte me amarás
o más que amarte pudiera,
te daría esta media vida y otra,
si otra vida tuviera.
Porque he andado mil caminos
y en todas partes he visto.
Del amanecer el brío
tontos al canto,
y amores padecidos,
gente que buscó la gloria
en magnas tareas,
sin sendero ni camino. 
Más no he visto querer igual
ni amores parecidos.
Y es que he andado tanto como para saber,
ya sin premura ni congoja,
que el final del camino,
no marca el fin de la historia.
Al menos no, para cuando amar has nacido.
no, para cuando la muerte te supo a gloria.
Si yo pudiera mi moza,
más que tenerte me amarás
o más que amarte pudiera,
te daría esta media vida y otra,
si otra vida tuviera. 

LPF.01f85

Artista plástico: Gustav Klimt (1862-1918).

Obra: Mother and Child 

No me fíes tus besos

No me fíes tus lágrimas, 
no me fíes tus besos,
no me des tu amor, 
si no lo merezco.
Prefiero un amor impar,
un beso al viento, 
prefiero la soledad,
preferiría incluso el silencio.
Porque amo tu libertad
y detesto tus argumentos,
porque te quiero con todo mi ser...

Y es que amarte me viene mujer,
como de afuera hacia adentro,
sin que pueda atraparlo,
sin poder retenerlo.
es como la cálida brisa
que en mi rostro esboza una sonrisa,
mientras acaricia tu pelo.
Por eso te quiero libre, libre como el viento, 
porque sólo si eres libre, 
ambos podremos serlo.
Y es que amarte mujer me viene
como de afuera hacia adentro.
Dicho podría ser,
como anillo al dedo.

LPF.01f85

Artista Plástico: Alvaro Rejas.

Obra: La vendedora de ajos.

Epitafio.

Aquí yace el cuerpo
de quien vino al mundo sin penas

y amó sin privilegios.
De alguien que nació con las manos pequeñas,
pero con grandes sueños.
Aquí yace su cuerpo sin alma,
y el último de los intentos.
Más no la última palabra,
aquí no yace el amor,
ni mora el remordimiento.
Y a la tierra vuelve,
por la apariencia inverosímil del cielo ,
o porque a la tierra pertenece
y le hace mejor al cuerpo.
Hombre de muchas raíces,
de un sólo sendero.
Aquí yace tu cuerpo, cual retirada a tiempo,
más no muerto por las heridas
ni por el febril miedo.
Yace aquí el cuerpo 
de quien lo tuvo todo en vida,
sin ser esclavo ni dueño...
Descansa en paz cual hombre bueno.
Pues hombre fuiste
y entre los hombres,
bueno...

Gota de lluvia.

No oses trepar gota de lluvia,

como si la gravedad te fuera ajena

como si no os pretendiera el mar o el cauce del río, 

como si el cielo para ti aún guardase un sitio,

como si no te amase la tierra. 

Cesa la disputa, 

alivia las sedientas flores,

sé la alegría en los pies traviesos de un niño,

sé la esperanza del seco monte. 

Confúndete con una lágrima,

o fundete en los corazones 

de estos viejos, empañados y mugrientos ventanales,

que aún guardan secretos 

que sólo las puntas de mis dedos saben,

haciendo que me emocione...
Porque la esencia de un amor es algo abstracto,

algo que nace y no muere,

dos cuerpos devorándose a cada instante,
en apoteósico júbilo y desenfreno. 

Mil veces con la mirada

otras mil con el pensamiento,
más, todas con el alma,
con el alma todas, 
porque de otra forma no podrían hacerlo...
No oses trepar gota de lluvia, 

como si la gravedad te fuera ajena. 
Más no caigas sin razón...

LPF.01f.85

Artista Plástico: Alvaro Reja

Obra: Pastor bajo la lluvia.

Tronco torcido.

Porque le vale ser, 
no haber sido.
Guarda silencio y suspira, 
sin derramar lágrimas ni sangre
por un amor casi infame
que pretende llegar al cielo,
cual tronco torcido. 
Y le muerde el dolor 
sepultado por un lustro
con la esperanza desierta, 
más, con cálido alivio.
Besarte mujer ha sido fácil,
amarte igual de sencillo.
Tanto fuiste, 
tanto eres,
más, nada serás mujer, 
si te olvido.

Obra: La giocconda.

Artista Plástico: Leonardo Davinci.

No cobija mi paciencia.

No cobija mi paciencia la angustia 

de para quien bajo este abrazador sol

se esconde.

Amedrentado por la fortuna que le ha tocado vivir,

lejos de la gloria del sacrificio

y su propia excelencia.

Del hombre que con muchas virtudes

prefiere morir en silencio,

temiendo no ser perfecto,

tomando antes por salida la fe

que su propio esfuerzo. 

No cobija mi paciencia 

a quien decide no ayudar y condena.

A quien nada hace y critica,

a quien por su fortuna a otro culpa,

o a quien cree tener 

la mala suerte por herencia...
No cobija mi paciencia

a quien por amor se sacrifica

a quien por su sufrimiento

recompensa espera. 

A quien por dinero con su alma se excusa

o su esencia muta. 

A quien no perdona o del dolor abusa.

A quien para amar necesita reglas. 

No cobija mi paciencia

Fe de pobres que culpa dioses y todo acepta.

Ni la piedad ni la mentira

o por el orden que vengan.

Ni los días perdidos, 

ni las horas muertas.

Porque la esperanza no muere,

porque la vida no espera.

Porque para terminar algo,

Empezarlo siempre ha sido la primera regla.

Artista Plástico: Leonid Afremov.

Maridajes perfectos.

Maridajes perfectos,
el de la paciencia y el silencio,
el de la muerte y la vida,
el de mis palabras y como te recuerdo,
el de las despedidas y los reencuentros.
Mil besos y tu cuerpo,
... mis besos y tu cuerpo.
Y la luz de una vela y la penumbra,
O las piedras y el camino,
el azar en día nuevo, 
incluso después de la lluvia
o a pesar de nuestro destino incierto.
Maridajes perfectos,
el del fracaso y los intentos, 
el del éxito y las críticas, 
más sencillo, cine y palomitas,
te quiero y un beso,
el de las lágrimas y las sonrisas, 
el del amor y el respeto.
Maridaje perfecto, 
que ambos pudiésemos compartir lo que nos quede por vivir.
Aunque a ciencia cierta, 
no sepamos del todo nunca, como hacerlo.

LPF.01F85.

Obra: La nacencia.

Artista plástico: Alvaro Reja.

.

quien le espera...

Sin importar cuanto tiempo,

la muerte le espero después de nacer.

Y sintiose honrada y dueña de su cuerpo,

como de todo lo que envejece y muere 

o lo que simplemente mata el tiempo. 

Abrumada y tristemente alegre

con la certeza de quien le tendría para siempre

aunque fuere sin tardes de sol, 

sin colores ni besos,

y convencida de que no podría escapar de su propio final.

Quiso que en vida alcanzare todos sus sueños,

que fuere feliz y que muriese de viejo

en un compasivo intento por agotar sus penas

porque a vivir aprendiera

o para que tan sólo fuera,

más que la suma de todas sus derrotas y miedos...

Y le esperó sin premura 

y con tan áspero silencio.

Que sólo pudo advertir de ella el tiempo. 

Menos, por las arrugas 

y más por lo sabio, que por lo viejo. 

Oh moribundas penas,

jamás sabrá la muerte que es él 
quien le espera,

en días tan escasos,

que a penas piensa en ella.

Aunque cautelosamente recorra su cuerpo,
zigzagueando a cada instante, 
por el cálido torrente de sangre
que se precipita del corazón hacia sus venas, 

haciendo más dulce su agonía
 en cada intento de abrazar cuanto les separa,
para amar sin reglas.

Obra: Paisaje Poeta.

Artista Plástico: Alvaro Reja.

Crueles Manía

Cruel manía esta de conservar todo lo que muere

de encumbrar el amor o pretender serlo.

De dar gracias a Dios por todo lo que no he perdido

o por lo que aún conservo,

de reconocer el sacrificio propio

y menospreciar el ajeno.

De creer saber cuánto es ese poco que para ser feliz necesito

y el mal vicio de haberlo olvidado para cuando lo tengo.

Cruel Manía esta de creer merecer todo lo que anhelo 

y de sobras tener excusas para no pretenderlo,

de a veces como lo pienso decirlo, 
o esta de creer de todo haber ido y vuelto,

y es que de ironías y crueles manías,
 pareciere lo mejor estar hecho...
A veces de lágrimas y sonrisas,
de tropezar siempre con la misma china, 
o caer siempre en el mismo agujero,

de sufrir cosas que no he vivido 
y procurar soluciones a problemas que no tengo
y  entonces descubrir que el infierno queda vacío
si los demonios y malos vicios por instantes  poseen mi cuerpo,
haciendo del presente una eternidad 
y del amor algo incierto,
poniendo palabras, 
donde sólo debería haber silencio...

Cruel manía esta de dormir sin sueño.
 o la de soñar despierto,

la de respirar sin motivo

o la de atragantarme con el aire si te veo,
 porque a veces no lo necesito,
porque te quiero más que me quiero,
porque para amarte he nacido
y por amarte, no he muerto...
Y entre tanta necedad y crueles manías

mi socarrado corazón no pierde el gusto todavía,

y a ti da, el goce más grande

entre lágrimas y sonrisas, entre papel y tinta 
 en la bondad de un silencio, que a tu ausencia ya no abriga ni atiza,

a sabiendas de que el amor y el olvido,

jamás ocuparán, el mismo asiento...

China-Se refiere a (Piedra.)

LPF.01f85.

Artista Plástico: Alvaro Reja.

También podría ser...

También podría ser la brisa,

o la semilla de un árbol frondoso y fuerte,

podría ser tierra fértil,

o el arroyo al que se encomiendan

las felices hojas de los sauces al morir.

Podría ser una nube 
equilibrando el peso del cielo,

lluvia de abril haciendo flores.

Podría incluso ser el más evocador de los silencios,

la tristeza devorada en versos

el único espacio vivo entre el agua y el fuego.

y comprender a la postre de lo vivido

que podría ser cualquier cosa, 
y sin dudarlo ni melindres te seguiría queriendo.
Sin enfados, 
sin mirar tan fijamente al pasado, 
sin decir palabra,
como quien da alcance a su alegría sin porfiarlo, sin haberlo dudado. 
Más sin embargo no apremia en vos 
oficios de enamorado.
Cuando también podría ser 
las sonrientes flores danzando al son del viento 
en un cuenco de agua y barro
el beso en la espalda que te estremece
o el olor en la mañana a leche caliente y pan tostado.
y comprender para entonces, 
a la postre de lo vivido,
que podrías haber sido cualquier cosa
y en cualquiera de tus formas 
y sin saber cómo, por qué ni hasta cuándo,
te seguiría amando.
Como la trucha al trucho 
o simplemente como las gaviotas al verano.

LPF.01f85.

Obra: Por amor al arte. 

Artista Plástico: Alvaro Reja.

El beso.

Después de besarla me rendí,
sin decir palabra,
sin otro remedio.
Después de besarla me rendí,
como las hojas en otoño a la brisa,
como a la evidencia, la duda,
como lo hizo aquella tarde, el pez al anzuelo.
Después de besarla me rendí,
feliz de que fuera cierto 
y entonces quise morir...
Quise morir a su lado de viejo. 

Obra: Palencia Soñada.

Artista Plástico: Alvaro Reja.

LPF.01f85.

El contoneo de tu sonrisa.

Y si fuera este el final 

de sobra deberías saber que eres la primera.

Que no miento si juro que moriría por ti, 

que no miento si digo 
que por ti daría la vida entera. 

Esta vida y otra más, si la tuviera.

Que no mentiría si te jurase 

que al margen de respirar 

seguiré incordiando a las estrellas.

como lo hicieron al Quijote los tímidos molinos,

como lo hace el silencio a la furibunda duda,

o un gato negro a la luna llena.

Únicamente por acortar esta maldita distancia que nos separa,

o tan sólo por tenerte un poco más cerca.

Para que desahucies esta agonía de amar lo que no sabía

y poder besar cada mañana el efímero contoneo de tu sonrisa

al borde del abismo de tu mejilla

con el silencio de una lágrima que no calla 
y la lengua mordida,

con la esperanza colgada del último día
de alguna promesa de amor olvidada 

y aun enredada en las telas de arañas de mi alma vacía...

Y con los ojos cerrados y mi corazón arrebolado y resuelto,

te juro amor que voy a encontrarte,

con el único propósito de amarte,
como si la vida sin ti no tuviere sentido.

Y juraré ante Dios y el resto de los mortales

que serán mis penas pequeñas,

si al final del día puedo abrazarte.

Si consigo que siempre quieras besarme 

y que tu sonrisa sea mi estandarte,

en los días en que nada ni nadie parezca salvarse,
ni tan siquiera el amor.

LPF.01f85

Artista plástico: Leonid Afrémov.

Si fuera por el amor.

Si este fuera el final
sólo tú podrías decirme a que sabe, 
tú que sabes tanto de jamases y nuncas,
tanto de causas y azares,
tanto de sufrir y gozar,
como del destino en si mismo
y sus obstáculos insalvables.

Anda ven y dime mujer sibila y hermosa,
si en tus trueques de amores por silencio
haz encontrado más de lo que tenías
o más de lo que todavía tienes.
Y háblame de días grises
con finales alegres
de la vida y si te parece una sinfonía
cuando la soledad se adjudica
de tus mañanas algunos días 
con palabras de amor escritas 
para un amor que más que doler, escuece.

Soy como la flor que entre las hojas de un libro
aún espera el milagro de la primavera.
Soy de tu amor la parte que no tiene sentido,
lo que mantiene tensa la cuerda floja de tu cariño.
Sin embargo por ti amor, 
qué cosa no podría haber sido,
o por ti amor, que qué cosa no fuera?
Si dispuesto estaría a ser, 
la paz en el infierno o tu paraíso.
sería tus alas o el salto que te aboca al vacío.
Sería si me lo permitieras amor,
para cada día de dolor, alivio.

Y para cuando advirtiera por el brillo de tus ojos,
o por el desdén de tu mirada que ya no es a mí a quien amas. 
Al margen de respirar, 
viviré como si nada más importara.
Sabiendo que si este fuera el final,

tan sólo tú pretendes llegar antes que yo.

Y que si fuere por el amor,

Ni tan lejos ni hasta aquí 
ni tan duradero ni tan afable.
Ni tan sublime ni tan importante, 
como para que de amor, amor mío, pueda yo morir.
Sin que antes amor mío, 
no hubiere muerto yo por ti...

LPF.01f85

Artista plástico: Gustave Klimt.

Obra: Retrato de Adele Bloch-Bauer I

Creative People.

El fuego en tu mirada.

Veo el fuego en tu mirada

y siento tu dolor en el aire.

Siento tu dolor tanto y tan fuerte

que sólo porque lo siento

me mantendré distante.

Antes de que olvide como respirar
y sin que sepas que eres mi aire.

Hasta que mi silencio fecunde tu soledad
o sientas ganas de besarme.

Sin reglas estrictas para vivir

sin reglas estrictas para amarte.

Sin la angustia de encontrar una ruta segura 
que nos libere de este dolor infame.

Y puede que sea como el barro 
y que no alcancen la luz  mis ojos por encima de los arboles.

Sin embargo tuve el brillo de los tuyos

y he sabido de tus intentos por olvidarme.
Fallidos e imperfectos a pesar de tus esfuerzos
Mientras ausente he crecido sin que me puedas herir...

Y no ha podido tanto el amor

 ni el tropezarnos en camino tan estrecho.

Y sin importar hacia donde voy 
o que tan lejos me puedan llevar mis pasos,
nada he de buscar en otros brazos,
Y he tan sólo de romper este maleficio
 de no poderte amar con el desatino de saberme amado
 con la fuerza de un viento huracanado
que ansioso trae las lluvias de verano 
sediento de flores y barro. 

Y para cuando llegue la oscura madrugada 

ya envueltos entre mis tibias sabanas y el deseo.

Te convidaré a desnudar ese silencio humano y mortal que te apaga.

Mientras cierro los ojos y te abrazo

como si la vida no tuviera final, 

como si pudiera encender tu alma con un beso. 

Pidiéndote entre cucamonas y carantoñas que no te vayas... 

que no te vayas... 

Pero veo el fuego en tu mirada 

y siento tu dolor en el aire. 

Siento tu dolor tanto y tan fuerte. 

Que sólo porque lo siento, 

me mantendré distante. 

Aunque jamás te pueda olvidar. 

LPF.01f85.
Creative People